Nuestro Árbol de la Vida es una gran Síntesis del funcionamiento del Cosmos tal como lo conocieron los Antiguos. Se dan la mano las Matemáticas, la astronomía, Los Yaos, los Trigramas y Hexagramas, filtrados por la visión sabia del Shen y de los Clásicos.
El Árbol de la Vida en Acupuntura Vietnamita es un símil del Cosmos Humano. Corresponde a nuestros métodos diagnósticos y de tratamiento. Está alejado de los conocidos tradicionalmente como «8 Principios», el Diagnóstico Sindromático o el tratamiento por Protocolos o Recetas. Dentro del diagnóstico, humano y cambiante en cada respiración, es el Hilo de Ariadna que nos llevará de vuelta a la Salud.
DEL ÁRBOL AL HOMBRE
Convergen en él la sabiduría Antigua y la visión molecular de la vida, de una manera muy orgánica para que el acupuntor pueda trabajar cómodo con ambas alas de la ciencia y corroborar de manera tangible el efecto de sus tratamientos. Comprendido el I ching, y su aplicación a las ciencias médicas, nos queda claro que el Hombre es un sistema Jerárquico de Funciones, donde trabajamos de lo general a lo particular siguiendo un orden muy particular.
Primero trabajaremos las Raíces del Árbol de la Vida. Todas enferman por deficiencia y serán examinadas en detalle. Sus síntomas son prioritarios, pues una Raíz defectuosa se expresará en todas las ramas y hojas generando sintomatología variada. Al corregir la raíz, el Árbol florece.
En el Tronco encontramos a todos los órganos de nuestra economía en un concierto armonioso, donde resuena la enfermedad como una nota desafinada. Podemos encontrar cual sistema de meridianos está afectado y seguir su recuperación de manera instantánea. Logramos también seguir la evolución de un factor patógeno minuto a minuto, y tomar medidas al respecto. Palpando meridianos y puntos determinamos cuales medidas terapéuticas tomar, y sabemos cuándo nuestro tratamiento ha tenido el éxito esperado, todo en tiempo real.
También usamos el pulso, pero acá, a diferencia de otras Escuelas, nos sirve para confirmar nuestro diagnóstico, más que para obtenerlo.
En la copa del árbol encontramos las ramas, expresando las polaridades Yin yang del funcionamiento del tronco. Podemos tratar afecciones simples y complejas identificando el balance Yin Yang del sistema. Uso las ramas mayormente para trabajo Osteomioarticular, con la técnica nudo raíz y resultados inmediatos y sostenibles en el tiempo.
Por último, trabajamos las hojas de la copa del Árbol de la Vida, pues en ellas tenemos todos los síntomas del universo Humano. ¿Como no perderse en esa sinfonía? Recordando siempre que los síntomas más locos y variados son, en realidad, un reflejo del desequilibrio en las raíces.
Las hojas también se cambian y se mudan con el tiempo, siguiendo las 5 leyes de las Cinco Funciones.
TRATAMIENTO EN EL ÁRBOL DE LA VIDA
En nuestra Escuela la acupuntura no duele. Si duele nuestra punción ha lesionado el Qi y el tratamiento ha perdido efectividad. La punción es superficial para todas las patologías pues enraíza la energía de los 10 troncos celestes en las 12 ramas terrestres, dando resultados extraordinariamente potentes, y el efecto de este se mantiene una semana, a veces más.
Un diagnóstico se corresponde con un único tratamiento, con cambios observables en la lengua al finalizar el mismo.
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